fénix
de madrugada (1996)
DE PRONTO EN UNA
PLAYA INTERMINABLE
Toco en la oscuridad
las cerraduras.
¿Cómo llegué
hasta aquí?
Es una extraña
casa
que rodean tinieblas,
y me llaman.
¿Quién eres
tú, la que me canta?
Recuerdo ahora el mar.
¡El mar! Si yo pudiera
volver al mar a aquella
playa
donde llovía
siempre. Allá arriba las verdes colinas
y más allá
la tierra escarlata, y la Gran Cordillera
que vigila volcanes,
el viento que sopla desde allí,
y el cielo de cristal.
..............................................Nadie
en las dunas.
La lluvia ahuyenta
y me deja solo en esta
playa de pronto interminable.
Como el mar es la casa,
como la lluvia sus muros.
Siento mis pasos: ya
están aquí, y abro la puerta.
¿Cómo cruzar
el fuego que arde entre tus pasos y los míos?
¿Quién me trajo
a estos muros que se encienden y se apagan?
Y entro en otros cuartos
que se abren a otros cuartos,
y el silencio es un
cíngulo dormido en los dinteles.
La imperceptible niebla
empapa las recámaras,
pisa los zócalos,
roza ventanas, hunde los lechos.
Mis pasos se adelantan
al llegar a la sala, al llegar a la mesa,
al llegar al libro
abierto de polvo,
al libro y a la mesa
que nadie ha tocado en mil años,
y nadie vendrá.
....................................................Pero
ahora la niebla
toca con su frente
los umbrales.
Ya no hay nadie en
la casa. (Si hubiera alguien,
¿a quién amar
ahora?). Toco la mesa
y la mesa se ilumina.
........................................................Toco
las cerraduras
y las cerraduras se
abren.
..........................................Toco
en la oscuridad los muros,
y los muros se apartan,
y escucho en el silencio
de la sangre el río que me habla sobre esta oscuridad.
|